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Riad, la capital de Arabia Saudí, es una ciudad con una doble cara, que se alza majestuosa sobre el desierto rojo de la península arábiga. Al tiempo que conserva con orgullo sus tradiciones y preserva con esmero su patrimonio histórico y cultural, tiene un marcado carácter futurista: un rapidísimo desarrollo la ha transformado a lo largo de las décadas de una minúscula ciudad, construida en el camino de La Meca, en una metrópolis contemporánea y dinámica y en un centro de comercio internacional.
Especialmente durante el siglo XX, gracias a sus yacimientos petrolíferos, Riad canalizó hacia sí enormes inversiones que impulsaron la construcción de palacios, rascacielos e infraestructuras en nombre del lujo y la máxima modernidad. Ejemplo de ello son dos obras de gran pericia ingenieril y alto valor estético: la refinada Al Faisaliah Tower, realzada por su cúpula de cristal, y el Kingdom Centre Tower, de 120 metros de altura, galardonado con el célebre premio Emporis Skyscraper Award 2022 por su diseño único.
En Riad, sin embargo, sobreviven edificios que también hablan de su pasado. El palacio de Masmark es una fortaleza de ladrillos de arcilla y barro terminada en la última década del siglo XIX: aquí se libró en 1902 la batalla de Riad, que más tarde condujo a la fundación de la actual Arabia Saudí. A poca distancia se encuentra el palacio de Al-Murabba, de planta cuadrada y dos torres solemnes, caracterizado por elementos arquitectónicos tradicionales y un gran claustro interior rodeado por un jardín. Entre los lugares de culto, la Gran Mezquita Imam Turki Ibn Abdullah destaca especialmente por su tamaño: con una superficie de unos 17.000 metros cuadrados, puede albergar hasta 17.000 personas.
La ciudad de Riad, por tanto, combina las vicisitudes históricas con el encanto innovador y en constante evolución de su presente. En los últimos tiempos, para optimizar el sistema de vías públicas y ponerlo a la altura de tanta modernidad, se han construido nuevas paradas de líneas de metro con aparcamiento al aire libre.
Uno de los factores clave del proyecto fue el sistema de iluminación, que supuso la instalación de luminarias Disano en las plazas de aparcamiento. Se seleccionaron luminarias modelo Torcia LED, que son ideales para entornos exteriores como zonas de aparcamiento y zonas residenciales. El uso de fuentes LED modernas no sólo permite un alto nivel de ahorro energético, sino también un buen índice de reproducción cromática, lo que garantiza la mejor visión posible y el máximo bienestar para el ojo humano.
El cuerpo esbelto y la forma sobria de la farola confieren elegancia y armonía a la luminaria de Disano, diseñada en el sofisticado estilo Made in Italy. Un diseño, por tanto, bien estudiado para permitir una integración armoniosa con cualquier contexto externo, ya sea un paisaje o una estructura arquitectónica. Los materiales utilizados son el resultado de una cuidadosa selección, para que sean duraderos.
Gracias al nuevo sistema de iluminación Disano, el resultado obtenido en los aparcamientos del metro de Riad es realmente notable: una visibilidad extraordinaria para garantizar una mayor sensación de seguridad y la máxima protección de la vista humana y del medio ambiente, al tiempo que se consigue una gran economía.

Panattoni Park Bydgoszcz II

Mobiliario urbano en Riad