Italiano

English

Français

Español

Русский

Polski

Português

Čeština

Hrvatski

Slovenščina

En otros tiempos, Stintino era un sencillo pueblo de pescadores, construido en 1885 con el duro trabajo de 45 familias ligures que se habían visto obligadas a abandonar su tierra, la isla de Asinara, porque el Reino de Italia había decidido establecer allí una colonia penal y un lazareto. En 1988, Stintino se convirtió en municipio de pleno derecho y, gracias a su espléndida posición geográfica rodeada por dos ensenadas -el Porto Vecchio y el Porto Nuovo-, se convirtió en un popular centro turístico que atrae a miles de visitantes de todo el mundo.
A unos cincuenta kilómetros de Sassari, su territorio es un tributo a la naturaleza más inviolable: una delgada franja de tierra en el norte de Cerdeña, con las aguas transparentes y de un azul intenso del mar de Cerdeña y el golfo de Asinara acariciando sus impresionantes costas, como La Pelosa. Votada varias veces entre las playas más bellas de Italia y Europa, La Pelosa encanta por la finura y blancura de su arena, que luego da paso al tono rojizo de la cercana playa de Cala Lupa debido a la presencia de un paisaje más bien rocoso.
En un pequeño islote frente a la playa de La Pelosa se alza un edificio emblemático de Stintino: es la Torre Pelosa, una de las muchas estructuras defensivas de Cerdeña, construida en 1678 por los aragoneses y de 10 metros de altura.
Visitar el Museo de Tonnara, en cambio, significa sumergirse en la historia de este encantador pueblo y comprender su identidad. Aquí se exponen objetos y artefactos relacionados con la pesca del atún, principal actividad económica de los lugareños: desde la vestimenta de los pescadores de la época, sus herramientas y cuadernos de bitácora, hasta una fiel reconstrucción a escala de una almadraba. Inaugurado en 2016, el museo está situado en la carretera panorámica que conduce a la ciudad.
Y es precisamente a lo largo de la carretera escénica donde se ha creado un nuevo carril bici/peatonal: Disano ha sido llamada para dotarlo de una iluminación adecuada.
Se trata de una luminaria muy especial, empezando por su diseño, que recuerda a los puertos y las estaciones balnearias; desde el punto de vista técnico, las fuentes de tecnología Led garantizan un rendimiento luminoso perfecto, un importante ahorro de energía y una vida útil muy larga. Asimismo, el color acero corten de Bitta, con su tono cálido, ayuda a crear un vínculo armonioso entre la luminaria y el lugar donde se instala.
Además de su validez, el flujo constante y a gran altura contribuye no sólo a una mejor visión, sino también a una gran seguridad para quienes transitan por el sendero de Sassari.
Gracias al sistema de iluminación desarrollado por Disano, el carril bici/peatonal de Stintino ha recibido así la mejor iluminación para que pueda recorrerse con total serenidad, especialmente tras la puesta de sol.

Panattoni Park Bydgoszcz II

Carril bici/peatonal Stintino